Reseña veraniega (Parte 2): Blue Planet Recontact - Game Moderator's Guide
Que hacer con este juego (o muchos otros)
Tal como exponía en la primera parte de esta reseña, hay una pregunta que se repite ante ciertas ambientaciones que se salen de lo habitual, o para las que el estereotipo de "aventureros antisociales buscando problemas" no encaja con planteamientos más sobrios; una pregunta que es "¿Qué hago con este juego?".
En el caso de Blue Planet, al igual que en otros, no creo que sea la pregunta correcta. Primero porque es posible recurrir al estereotipo de "aventureros antisociales buscando problemas" en Blue Planet; incluso si no le hace justicia a la ambientación, y salvando elementos estéticos no hay nada que impida reproducir la estructura de una campaña de, pongamos por caso, Cyberpunk o Shadowrun.
(De hecho, es perfectamente posible plantear una aventura en la que un prospector le vende un mapa del tesoro - digamos una veta de Long John - a los personajes, explorar varios hexágonos de mar e islas, tener unos encuentros aleatorios con animales, nativos y piratas, y terminar explorando una serie de cuevas submarinas pobladas por criaturas más o menos hostiles. ¿Suena familiar?).
En realidad, en mi opinión la pregunta siempre ha sido "¿Hay algo que quiera hacer con este juego, y que justifique el tiempo que voy a invertir, cuando tiene que competir por mi atención con otros cincuenta juegos que ya tengo?" y esa es más difícil de resolver.
Pero en cualquier caso, la Guía del Moderador de Blue Planet Recontact intenta dar una respuesta a esta pregunta, y lo hace proponiendo una docena de opciones de campaña, incluyendo en ellas una discusión de los temas involucrados, sugerencias de personajes jugadores, personajes de interés, peligros e ideas para aventuras. Así las opciones de campaña incluyen una adaptación de 20.000 Leguas de Viaje Submarino (The Argonauts), científicos embarcados en investigaciones de campo (Avalon), operativos e intrigas corporativas (Chrome), trabajadores cualificados en profesiones de alto riesgo (Deep Sea Divers, First Responders, Red Sky Charters), nativos y colonos enfrentándose a los problemas del día a día (Azure, Spoiling the Broth), horror cósmico en una base lunar (Night Shift), operaciones militares encubiertas (Operation Polypod), guerrilleros nativos luchando contra los invasores (The Songless) o mercenarios de gatillo fácil ejecutando misiones para superiores inescrutables (Trienos).
Es una buena selección. Como he dicho no sé si realmente resuelve la pregunta, pero posiblemente le facilite las cosas a un director de juego al facilitarle una propuesta concreta a unos jugadores que en la mayoría de los casos no se han leído el libro ni saben gran cosa sobre la ambientación.
Planteadas estas opciones, el grueso de la Guía del Moderador pasa a cubrir la ambientación, con atención especial la principal localización geográfica: El Archipielago Pacífico, cuyos territorios y asentamientos, facciones en liza y principales conflictos geopolíticos se describen con sobriedad y detalle, zona por zona, incluyendo además unas 80 ideas para aventuras.
Aquí debo retractarme en parte sobre mi observación previa sobre el tibio tratamiento de las corporaciones. Es cierto que no se presenta la mezquindad de baja estofa de la cultura corporativa y de los Elon Musk de nuestros días, pero cuando las corporaciones que ignoran abiertamente las leyes, practican la esclavitud, y organizan sabotajes, atentados, escuadrones de la muerte e incluso planes para una limpieza étnica, lo cierto es que lo demás sobra.
En general y salvo algunos detalles cosméticos no hay grandes cambios respecto a ediciones anteriores; tampoco son necesarios, la densidad y riqueza de la ambientación ya eran más que notables y suficiente para alimentar varias campañas, siempre que uno esté dispuesto a invertir el esfuerzo necesario para sumergirse (ejem) en la ambientación.
Adicionalmente, se ha incluido una nueva localización que no estaba en ediciones anteriores: El archipiélago Endeavor, colonizado tras el Recontacto. Es una aportación interesante, si bien menos ambiciosa: Dado que la colonización es reciente y la distancia entre archipiélagos notable, en Endeavor no tiene presencia nativa, por lo que una de las principales fuentes de tensión desaparece. Aquí el conflicto se limita a los choques entre la OEG, los colonos y la corporación Biogene y una colonia de China. Con todo, se agradece la intención de incluir material de nuevo cuño.
Aparte de la geopolítica, se describe la geología, la meteorología y ecología de Poseidón, con especial atención a la biología de Poseidón. Aquí se nota la experiencia profesional del autor: Las criaturas de Poseidón presenta un arbol evolutivo reconocible con rasgos morfológicos comunes, en vez del típico popurri de bichos sin relación alguna. También se dedica un capítulo a las misteriosas nereidas (criaturas avistadas en misteriosos encuentros por todo Poseidón y tras las que se encuentra la clave de muchos de los secretos de Poseidón), y a su presencia y actividades en distintos territorios; incluyendo un apartado con leyendas urbanas sobre las mismas que es hilarante.
Por último se presenta un resumen de la organización de la OEG y de los estados corporativos en la Tierra, así como de la presencia humana en otras partes del sistema solar: Luna, Marte y el sistema solar. Sobre esto último no hay nada que destaque especialmente o esté o fuera de la tónica de la mayoría de juegos de ciencia-ficción dura (el mayor atractivo de la ambientación siempre han sido las circunstancias únicas de Poseidón), y simplemente proporciona algo de textura adicional al universo descrito.
Conclusiones finales
Blue Planet siempre ha sido un juego con una sólida ambientación, y continúa siéndolo en una edición remozada. Y no se puede negar que existe un claro esfuerzo de facilitar el acceso a la ambientación y trasladarla a la mesa de juego con reglas más narrativas y simplificadas y opciones de campaña claramente delineadas (así como la producción de una campaña que está en playtesting para futura publicación). Queda por ver si lo conseguirá (me temo que la mayoría de juegos se quedan en la estantería en estos días), pero si a alguien le entra la inquietud por jugar aunque sea una partida aislada de este juego, no cabe duda que esta es la edición más indicada para ello.
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